Como puede haber aún expectación sobre cómo se desarrolló la Ruta Golfa, lo comento para los que se encuentren en ese estado de ansiedad. Que tenían previsto acudir y al final, no pudieron hacerlo.
No es que fuera mucha gente, éso hay que decirlo, pero hay que tener en cuenta que el margen de convocatoria fue muy corto. La cuestión estaba en que se celebrase la ruta, en la fecha tradicional que tocaba en estos días, porque la siguiente, ya será en Agosto.
Bueno, al tema. Poca gente también por todas partes. Como si hubieran bombardeado la ciudad. Temperatura agradable, así que fue una incógnita dónde se había metido todo el mundo.
Ya que éramos tan pocos, lo de hacer golferías, como que no. Que para éso hay que ir en grupo. Y dado que como digo, la ciudad estaba desierta. Al menos el placer de un paseo a ritmo vivo a altas horas de la noche, que no de la madrugada, como en otras ediciones anteriores, por zonas en las que de forma normal no se puede, sin salirse de las normas del buen comportamiento, y de las ordenanzas municipales de circulación.
¿Qué cuantos estábamos?
Pues lo que decía. No muchos.
Yo,.........y mis circunstancias.

Una piedra en el camino, me enseñó que mi destino era, rodar, ....y rodar........