A pesar de que la temperatura no era lo terrorífica que anunciaban los medios de información, siendo más bien una temperatura muy agradable, la convocatoria no produjo gran número de convocatoria. Pero sí que fue una ruta memorable con el reencuentro de Manu, desaparecido del mundo de los patines desde hace unos años, y que ha vuelto con ganas. Confirma el mismo refrán que se dice con la bici cuando se aprende a andar con ella…Una vez que aprendes, nunca se te olvida. Y lo mismo pasa con los patines.
